La última investigación que usa la red social Facebook como herramienta metodológica revela que el físico y la juventud son dos de los atributos que más valoramos los usuarios a la hora de establecer nuevos lazos de amistad. El estudio de la empresa BitDefender pone de manifiesto que la seguridad profesional puede verse comprometida al aceptar invitaciones de desconocidos. Por Flor Gómez Cortecero.
Facebook vuelve a ser una fuente muy útil para desarrollar estudios sociológicos. Se estima que esta red social, con sus casi 600 millones de usuarios, es oficialmente la mayor comunidad virtual del mundo, pero los problemas sobre la seguridad y la privacidad en torno a ella siguen generando gran debate público.
La empresa BitDefender ha presentado los resultados de un nuevo estudio sobre el comportamiento de los usuarios del ciberespacio, según el cual, 9 de cada 10 aceptan la invitación de amistad de un desconocido/a. Además, la belleza parece ser un elemento decisivo para incrementar la lista de amigos vinculados a nuestra cuenta.
Para demostrarlo, el equipo de investigadores de BitDefender creó un perfil falso atribuido a una atractiva veinteañera de pelo rubio y envió solicitudes de amistad a 2.000 miembros de Facebook de forma aleatoria. La muestra la componían personas de ambos sexos, de distintos puntos geográficos y ocupaciones variadas, y un rango de edades comprendido entre los 17 y los 65 años.
Los resultados del experimento no dan lugar a confusión: 1.872 de estos usuarios, lo que supone el 94% del total de la muestra, picó el anzuelo y aceptó la solicitud de la chica fantasma en tan sólo una semana. La fotografía que completaba el perfil fabricado por BitDefender fue el incentivo para que el 56% de los sujetos bajo estudio aprobara la invitación. Otros de los argumentos que los entrevistados esgrimieron para ello fueron la dudosa impresión de conocer realmente a la chica o un mismo perfil profesional.
La prueba también diferenciaba entre cuatro niveles de credulidad para definir a los usuarios, desde el más alto, que englobaba a aquellos que aceptaron la solicitud sin preguntas previas, hasta el más bajo, en el que se encuadraban los pocos que la rechazaron sin más. En los niveles intermedios estaban aquellas personas que aprobaron la amistad tras mantener un breve contacto online con la impostora.
Pero BitDefender quiso ir más allá y seleccionó a veinte de estos usuarios para entablar conversaciones con la chica a través del chat de la aplicación. El 10% de esta nueva muestra referencial desveló información personal en los primeros treinta minutos de la conversación, datos que en muchos casos pueden vincularse a contraseñas de cuentas en la Red. La conclusión de esta última fase del experimento es más preocupante si atendemos a la cuestión de la privacidad empresarial, ya que el 73% de los participantes reveló información confidencial acerca de su lugar de trabajo tras dos horas de conversación. Algunos de los temas que centraron la charla fueron proyectos futuros de la empresa, software utilizado y tecnologías inéditas.
Esta nueva investigación se une a otras anteriores desarrolladas por la empresa de software de seguridad sobre pautas de conducta en Internet, como por ejemplo, la realizada en agosto de este año sobre la debilidad de las contraseñas, o la que presentó en abril acerca del incremento del spam como consecuencia de las aplicaciones de juegos de las redes sociales.
Sin duda, lo más paradójico de este último sondeo llevado a cabo por BitDefender es que el 31% de los usuarios que aceptaron la invitación de la chica tenían puestos profesionales relacionados con la seguridad informática. ¿Es que acaso es excesiva la alarma social en torno a la privacidad en Internet? ¿O es que nos confunde nuestro innato sentido de buscar siempre lo más bello?
Fuente: tendencias21.net